La gingivitis y periodontitis (piorrea) son enfermedades que afectan a los dientes en sus encías y ligamento, provocando inflamación y sangrado de las encías, mal aliento, movilidad, con una pérdida progresiva, crónica y silenciosa sin dolor (hasta etapas avanzadas) del hueso, haciendo que se caigan nuestros dientes e incluso los implantes.
La prevención, diagnóstico y tratamiento precoz, y mantenimiento son fundamentales para el control de la gingivitis y periodontitis.
Como fase inicial, transmitimos al paciente que las causas principales de la gingivitis y periodontitis, son una insuficiente higiene diaria que provoca acúmulo de restos de comida y bacterias (placa bacteriana) alrededor de la encía que rodea los dientes, favoreciendo su inflamación. Esta circunstancia, potenciada por condicionantes genéticos y otros agravantes como el hábito de tabaco, puede estimular la pérdida de hueso o periodontitis.
Por lo tanto, la instrucción de hábitos higiénicos diarios adecuados, revisión de encías y dientes, junto a limpieza dental o tartrectomía periódica (cada 6 meses-1 año) son claves para el control de dichas enfermedades de las encías.
A veces, debido al estado avanzado de la periodontitis, son necesarios tratamientos de raspado y alisado radicular, e incluso cirugía periodontal, con el objetivo fundamental de salvar los dientes.